Los terminales con capacidad de carga rápida no son para nada nuevos, sin embargo poco a poco hemos visto avances a pasos agigantados de esta tecnología, sobre todo de la mano de Qualcomm, el gigante fabricante de microprocesadores móviles. No obstante, también es importante mencionar los avances de otras firmas como OPPO y su tecnología Super VOOC en este ámbito.
La historia de hoy tiene mucho que ver con este tema de la carga rápida, aunque no de manera positiva. El relato procede de un hilo en Reddit en donde una chica menciona que utilizó el cargador del recién presentado Samsung Galaxy S7 Edge para recargar la batería de su Galaxy S4, sin embargo se llevó una sorpresa para nada agradable al día siguiente.
¡Ouch! ¡Adiós Samsung Galaxy S4!
La imagen sobre estas líneas es la sorpresa que esta chica se llevó al ir a revisar su Galaxy S4 que dejó conectado a la toma de corriente con el cargador del Galaxy S7 Edge: ambos, terminal y cargador, totalmente quemados y derretidos. Pero, ¿por qué sucedió esto? Una vez analizada la situación, la respuesta es bastante sencilla.
La macabra escena es el resultado de la incompatibilidad del anterior tope de gama de Samsung con la tecnología de carga rápida que el cargador del S7 Edge posee y que permite lograr una gran cantidad de porcentaje de batería en pocos minutos. Esto se logra gracias al mayor tráfico de amperios que el cargador permite y que, obviamente, tanto el Galaxy S7 como el S7 Edge soportan.
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Por el momento no se sabe si se trata de un problema general que sucederá con cada situación de móvil y cargador incompatibles, pero lo más probable es que se trate de un caso muy aislado. Aún así, no está de más tener las precauciones necesarias e intentar no recurrir a cargadores de carga rápida con terminales no compatibles con esta tecnología.
Cuéntanos, ¿has vivido o escuchado de alguna situación similar?
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